viernes, 3 de enero de 2014

Madres a tiempo completo.

"Que el nuevo año nos eleve hasta ese lugar desde donde podamos ver
 infinitas posibilidades"


 


Reflexiones  para pisar cada una de las 24 horas que me llevan a las campanadas, al límite de este año, al encuentro con los nuevos deseos, al nuevo ciclo, a la petición de milagros...a una luz.

Un día con un camino cada vez más estrecho dentro del pensamiento hasta que se paró en una emoción asociada a la  imagen de las madres a tiempo completo.

Jamás, nunca como hoy, me he inclinado tanto hacia el lugar de la madre...
Y quiero decir que lo siento mucho, porque cada vez que se escriben textos así...parece que en el mundo no hay padres buenos o padres que sufren también el maltrato de la mujer con quien quiso tener a sus hijos, padres que si quieren estar, padres que luchan para que en los ojos de sus hijos ellos existan. 
Con el permiso de los que no se identifican con esta historia, quiero contar una realidad que si existe... No es una historia sobre como organizar el tiempo entre padres separados, no es una historia que quiera opinar sobre vidas privadas de los que buscan renacer y necesitan su espacio. 
Es una historia de mujeres que luchan para que las separaciones sean ligeras. Mujeres equilibristas y analistas que se forman para comprender porqué a su compañero de crianza le parece equivocado lo que otros anhelan tras el divorcio...la buena relación. Hablo de un grupo de mujeres que habitan en el mundo de la terapia para conocerse y hacerlo mejor.
Mujeres que se resisten a creer que ahora  toca el silencio roto de la crianza en común  con el que se lía lo que puede estar lleno del buen futuro para tus hijos.

Quiero escribir sobre   las madres que en fechas señaladas no están con sus hijos... sobre las   madres que acompaño que viven separadas de su alma por momentos cuando estiran sus brazos para entregar sus cachorros a esa ex pareja, que ya no es amigo, el padre que ejerce su crianza por tiempos cortos, un humano con el que ya no tienen complicidad porque el un día no quiso saber más  de ella y deja un vació grande entre los dos lleno de interrogantes.

Madres que les hacen la maleta a sus hijos! Y les ven   meter en ella a su peluche preferido mientras preguntan sus dudas y ellas responden haciendo del viaje una aventura...para que sus hijos no se divorcien del alma de sus padres.

Cierro los ojos y veo a madres que hoy como muchos otros días dejan a sus hijos con esa familia de el y que  a ella ya no la quieren.
Hablo de la noche en vela en la que ellas saben que nadie los conoce mejor que ellas. 

Las uvas de una noche así no endulzan, las campanadas no se oyen, los fuegos no explotan...porque lo que una madre quiere oír es el teléfono sonando con voces que digan que todo está bien.


Un experto en el alma infantil me dijo un día que los hijos son más felices si las almas de los padres están unidas...aunque los cuerpos estén separados.

Bienvenido 2014!

Que los padres en esa firma ante el Juez no se separaran del acto de amor que les vincula a sus hijos.
Que todos disfrutemos de nuestras elecciones...mientras aprendemos a no alejarnos tanto.
Que nazcan consensos para criar aquello bueno en lo que creen.
Que las madres siempre SEAN las madres de los hijos del padre por encima de todo, los padres también SEAN los padres de los hijos de la madre por encima de todo y los hijos SEAN lo primero por encima de todo.
Que las nuevas parejas de los padres no sientan celos de lo que queda entre ellos como padres.
Que ninguno de los dos elija dejar de estar mientras tanto que ocurre en sus hijos, se lo están perdiendo.
  

Feliz vida! Feliz año!
Puedes comentar esta entrada en mi facebook: Elena Thomsen.


Muchas gracias por estar.